miércoles, 8 de septiembre de 2010

La tecnología digital.

Foto: Escultura de Valle Inclán en Pontevedra. Galicia. España.

El uso de software de tratamiento de imagen que sustituiría la técnica del aerógrafo y del fotomontaje. Su divulgación y asimilación entre un público profano terminaría con el mito de la objetividad fotográfica (no tanto por la técnica de manipulación informática en sí como por la brutalidad con que se impondría la facilidad de esta manipulación): desacredita la fotografía como testigo fiable, la credibilidad ya no descansaría en las cualidades intrínsecas de la tecnología, sino en el fotógrafo como autor. La irrupción de la tecnología digital no sólo ha mostrado que la fotografía era un medio primitivo sino también degenerado. Joan Fontcuberta. El beso de judas. Editorial Gustavo Gili, S.L.

2 comentarios:

  1. Yo uso cámara digital y reconozco que me abre otras posibilidades, pero añoro profundamente mi antigua cámara, a la que colocaba un carrete al iniciar mi viaje, y valoraba cada foto como lo que sería una imágen única e irrepetible.
    Lo siento, pero soy una romántica sin remedio.
    Qué fotos tan bonitas, Sebas. Muchas gracias y un abrazo

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  2. Yo, que también empecé con esta afición muchos años antes del fenómeno digital, conservo el hábito, antes de apretar el disparador, de pararme, cuidar el encuadre, la exposición. Cuando sabíamos que el carrete estaba limitado (las famosas 12, 24 ó 36 fotos) y que luego al sacar las copias en papel nos costarían un dinerito, se daba a cada instantánea otro trato, otro tiempo. Lo que no quita para que valore muy positivamente las inmensas posibilidades que nos ha abierto la fotografía digital.

    Ana gracias por comentar.

    Abrazos.

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¿Y como voy a saber lo que pienso si no lo he dicho todavía? E.M. Forster.
Te doy las gracias por opinar y participar. Saludos.