La idea de construir una gran avenida en medio de la ciudad surgió allá por 1861, pero no fue hasta el 4 de abril de 1910 cuando Alfonso XIII hundía la piqueta de plata en la que entonces era la casa del párroco de la iglesia de San José, dando el pistoletazo de salida a esta obra faraónica, que no concluyó hasta 1952, cuando se levantó el último edificio, que en la actualidad es el Hotel Washington.
Su construcción transformó totalmente la ciudad, pues supuso la expropiación de 327 edificios –entre ellos el Teatro Lara o el Convento de San José- y la creación de 32 nuevas manzanas a lo largo de casi un kilómetro y medio de longitud.
Su construcción transformó totalmente la ciudad, pues supuso la expropiación de 327 edificios –entre ellos el Teatro Lara o el Convento de San José- y la creación de 32 nuevas manzanas a lo largo de casi un kilómetro y medio de longitud.
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¿Y como voy a saber lo que pienso si no lo he dicho todavía? E.M. Forster.
Te doy las gracias por opinar y participar. Saludos.