Los tiempos cambian y nosotros también nos transformamos. No somos las misma personas que éramos diez años atrás, no las que seremos dentro de cinco. Nuestros deseos y necesidades se van renovando y exigen que demos un nuevo perfil a nuestra vida. Para ello, ¿qué hemos de modificar? Cada ser humano tendrá sus prioridades, pero hay algo que une y solidariza a quienes habitamos este planeta, y es la necesidad imperiosa de encontrar el equilibrio emocional que nos permita llegar al destino elegido. ¡Nunca te detengas! Solamente haz un alto en el camino para la reflexión. Flexibiliza tus posturas, y adquiere la capacidad de adaptación a lo que el presente te exige. Walter Dresel.