Cerca de la localidad vizcaína de Kortezubi se encuentra el Bosque Animado de Oma, una obra que Agustín Ibarrola realizó pintando en los troncos de más de 500 pinos figuras humanas, animales y geométricas. Ibarrola comenzó a pintar en 1983, acabó la obra en 1991. En el verano de 1998 alumnos de Bellas Artes repintaron las figuras de las cortezas de los árboles.
Según Ibarrola, el bosque pintado invita a cada persona a recomponer las imágenes señaladas y las que surgen de su imaginación, así como a añadir sus propias motivaciones históricas, mitológicas o sus estados de ánimo, en un lugar muy cercano a las cuevas de Santimamiñe, que guardan valiosas pinturas prehistóricas. El bosque dispone de una señalización que permite a los visitantes captar el mensaje que el artista vasco transmite utilizando como soporte la corteza de los árboles.
Según Ibarrola, el bosque pintado invita a cada persona a recomponer las imágenes señaladas y las que surgen de su imaginación, así como a añadir sus propias motivaciones históricas, mitológicas o sus estados de ánimo, en un lugar muy cercano a las cuevas de Santimamiñe, que guardan valiosas pinturas prehistóricas. El bosque dispone de una señalización que permite a los visitantes captar el mensaje que el artista vasco transmite utilizando como soporte la corteza de los árboles.
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¿Y como voy a saber lo que pienso si no lo he dicho todavía? E.M. Forster.
Te doy las gracias por opinar y participar. Saludos.