miércoles, 16 de septiembre de 2009

Foto: El Retiro (Madrid)

De repente, estoy solo en el mundo. Veo todo esto desde lo alto de un tejado espiritual. Estoy solo en el mundo. Ver es ser distante. Ver claro es parar. Analizar es ser extranjero. Toda la gente pasa junto a mí sin rozarme. Sólo tengo aire a mí alrededor. Me siento tan aislado que siento la distancia que hay entre mí y mi traje. Soy un niño, con una palmatoria mal encendida, que atraviesa, en camisón de dormir, una gran casa desierta. Viven sombras que me rodean –sólo sombras hijas de los muebles rígidos y de la luz que me acompaña. Ellas me rondan aquí, al sol, pero son gente. Fernando Pessoa – El libro del dasasosiego.