¿Cómo acercar la política al ciudadano?; ¿cómo exorcizar esa impresión de que todos los políticos mienten por igual y por lo tanto es lo mismo votar por unos o por otros, o no votar?; ¿con qué anticuerpos inmunizar contra la indiferencia?: restituyendo al ciudadano soberanía y poder, garantizándole la decisión sobre la cosa pública. Sólo quien cuenta con los datos informativos esenciales, sin su manipulación, puede decidir con conocimiento de causa. Aquel que es manipulado o engañado no podrá elegir nada, o incluso peor: será inducido a deliberar algo diferente a lo que se imagina decidir. Flores D’Arcais. El soberano y el disidente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Y como voy a saber lo que pienso si no lo he dicho todavía? E.M. Forster.
Te doy las gracias por opinar y participar. Saludos.