Obra de José Muñoz "Muros"artesano de la piedra de Úbeda. Foto Sebas Navarrete |
El
tiempo no tiene por qué destruir la belleza, igual que la costumbre no gasta el
amor, lo pule igual que pule una herramienta el trabajo de las manos. Ambos, la
belleza física, el amor, adquieren con los años una profundidad y una densa dulzura
mucho más tangible, y también más excitante, que los espejismos de lo nuevo. Extraído
de “El atrevimiento de mirar” de Antonio Muñoz Molina. Editorial Galaxia
Gutenberg.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Y como voy a saber lo que pienso si no lo he dicho todavía? E.M. Forster.
Te doy las gracias por opinar y participar. Saludos.