Soy consciente
de que a mucha gente le molestará que equipare la religión con las noticias
falsas, pero este es exactamente el objetivo. Cuando mil personas creen durante
un mes algún cuento inventado, esto es una noticia falsa. Cuando mil millones
de personas lo creen durante mil años, es una religión, y se nos advierte que
no lo llamemos “noticia falsa” para no herir los sentimientos de los fieles (o
provocar su ira). Adviértase, sin embargo, que no niego la efectividad ni la
benevolencia potencial de la religión. Justo lo contrario. Para bien o para
mal, la ficción figura entre las herramientas más eficaces de la caja de
herramientas de la humanidad. Al unir a la gente, los credos religiosos hacen
posible la cooperación entre personas a gran escala. Inspiran a la gente para
que construyan hospitales, escuelas y puentes, además de ejércitos y prisiones.
Adán y Eva nunca existieron, pero la catedral de Chartres sigue siendo
hermosa.
“21 lecciones para el siglo XXI” de Yuval Noah Harari.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Y como voy a saber lo que pienso si no lo he dicho todavía? E.M. Forster.
Te doy las gracias por opinar y participar. Saludos.